Quisiera un abrazo de ella, si los tuviera al frente les diría que los quiero mucho y que me hacen falta, con esta frase Yuris Alexander Teheran Romero describe el profundo sentimiento por sus progenitores, la difunta Diosa del Vallenato Patricia Teherán, y Rodrigo Castillo.

Alex, como se presenta, ya tiene 20 años, tiempo en el que le ha tocado crecer al lado de recuerdos e inquietudes, dudas que algún día sueña con encontrarles respuesta.

A diario rondan en su cabeza, y abundan más en fechas como la de ayer 19 de enero, cuando su madre cumple años de fallecida, cientos de dudas que nunca ha logrado aclarar y que sólo con su madre o padre podría resolver. (Lea aquí: El confidente de Patricia Teherán cuenta los últimos momentos de la artista)

Alex, habló con El Universal.com.co de cómo ha sido su vida desde niño y cómo es ahora cuando ya su adultez empieza a salir a flote.

“Mis primeros años de vida los pasé con un tío, es el hermano de mi mamá quien estuvo viviendo con una muchacha por un tiempo. Ellos me criaron hasta los 5 años, luego ellos se dejaron y yo me quedé con ella hasta los ocho años, de ahí mi abuelo me mandó a buscar y viví con él hasta que falleció el año pasado”, inicia contando Yuri Alexander.

En esa época y rodeado de una figura paterna y materna sus días transcurrían entre la tranquilidad y la inocencia, tanto que cuando le dijeron la historia de su verdadera mamá (a sus 6 años), no sintió nada.
“No la conocí, no tengo recuerdo de ella conmigo, lastimosamente. Era un niño, no lo entendí, no le presté atención. Yo sabía que la señora con la que vivía no era mi mamá pero igual la quería y la quiero aún como tal. La noticia me la dio mi abuela y me contó que mi mamá estaba en el cielo y desde allá siento que me cuida y siempre está protegiéndome, me siento seguro y la siento a mi lado”, dice el joven quien guarda un innegable parecido físico con la más exitosa exponente del vallenato. (Lea aquí: Patricia Teherán: Cartagena aún recuerda a su Diosa del vallenato)

Alex duerme en el cuarto que era de su mamá, una casa de dos pisos en el barrio Nuevo Bosque y allí, todas las noches reza y mira el retrato de su Diosa, que reposa en la pared, para contarle cómo estuvo su día y a la vez, recordarle lo mucho que la extraña.

“Hago todo solo, mi abuelo me sostuvo hasta que terminé el bachillerato y ahora me sostengo solo, soy DJ en la discoteca Taboo Crossover Club, una discoteca de la ciudad”, contó.

Su vida es la música, “Me levanto todos los días con música, además ahora hace parte de mi trabajo, pero nunca he tenido apoyo para meterme de lleno en este campo, no tengo a nadie que me incentive a hacerlo”, afirma Alex, no dejando de lado el comentario de que “seguro si mi mamá viviera mi vida fuese diferente, muy feliz y la acompañaría a todos lados”.

NUNCA RECIBIÓ REGALÍAS

A pesar del éxito de su madre en la música vallenata, la familia de Yuri Alexander, según cuenta, sólo recibió dinero de las regalía tres años hasta que la mamá de Patricia falleció. “Mi abuela los recibió durante tres años hasta que murió, no me ha llegado nada a mi, no he tenido a quien preguntarle o con quien asesorarme porque estoy solo, todo lo que hago lo hago yo y no sé donde dirigirme ni a quien preguntar por eso”, afirmó el joven quien ahora vive con la última compañera sentimental de su abuelo fallecido y tios.


QUIERE CONOCER SU FAMILIA

Alex, quien prefiere obviar su primer nombre hasta saber la historia de porqué su mamá se lo puso, es un chico que inicia su vida de adulto en medio de la realidad de no tener una figura familiar que sea su punto de apoyo, quiere estudiar una carrera universitaria, se inclina por la administración de empresas y a la vez se pregunta por la historia que nadie le ha contado y es la de su padre, también difunto, Rodrigo Castillo.

“Tampoco nunca conocí a mi papá, Rodrigo Castillo, según me contaron a los cinco años mi abuela por parte de papá llegó a donde yo vivía con mi tío, miró cómo estaba yo y se fue, desde ese día no la he vuelto a ver. Si me preguntas que si quisiera conocer su familia diría que si, igual era mi papá y siempre me dijeron que él me quería mucho, que estaba bastante pendiente de mi, creo que él pasaba bastante ocupado, me decían que tenía una finca y no se más nada”, precisó Alex quien se imagina que no lleva el apellido de su padre porque a sus papás no les dio tiempo de registrarlo. “A mi me registró mi abuelo, aparezco como hijo de él, seguro a mi mamá no le dio tiempo de hacerlo”.

TAMPOCO HABLA CON LOS QUE ERAN AMIGOS Y COLEGAS DE SU MAMÁ

Al parecer y por lo que cuenta el único hijo de Patricia Teherán, luego de la muerte de ella nadie se volvió a acordar de él. “Ningún amigo de mi mamá se ha acercado a mi, no tengo idea quien es la gente que ella mencionaba en sus canciones y también me gustaría conocerlos porque ellos deben tener más detalles de mi mamá que quisiera saber. Hay gente que me dice que aún la escuchan, que la aman, que la recuerdan y yo no sé que decirles, no sé mucho de ella, sólo lo básico”, así concluye este joven su primera entrevista para medios escritos, una entrevista llena de ilusión, de muchas preguntas y sobre todo de muchos sueños y dudas por resolver.

Quisiera un abrazo de ella, si los tuviera al frente les diría que los quiero mucho y que me hacen falta, con esta frase Yuris Alexander Teheran Romero describe el profundo sentimiento por sus progenitores, la difunta Diosa del Vallenato Patricia Teherán, y Rodrigo Castillo.

Alex, como se presenta, ya tiene 20 años, tiempo en el que le ha tocado crecer al lado de recuerdos e inquietudes, dudas que algún día sueña con encontrarles respuesta.

A diario rondan en su cabeza, y abundan más en fechas como la de ayer 19 de enero, cuando su madre cumple años de fallecida, cientos de dudas que nunca ha logrado aclarar y que sólo con su madre o padre podría resolver. (Lea aquí: El confidente de Patricia Teherán cuenta los últimos momentos de la artista)

Alex, habló con El Universal.com.co de cómo ha sido su vida desde niño y cómo es ahora cuando ya su adultez empieza a salir a flote.

“Mis primeros años de vida los pasé con un tío, es el hermano de mi mamá quien estuvo viviendo con una muchacha por un tiempo. Ellos me criaron hasta los 5 años, luego ellos se dejaron y yo me quedé con ella hasta los ocho años, de ahí mi abuelo me mandó a buscar y viví con él hasta que falleció el año pasado”, inicia contando Yuri Alexander.

En esa época y rodeado de una figura paterna y materna sus días transcurrían entre la tranquilidad y la inocencia, tanto que cuando le dijeron la historia de su verdadera mamá (a sus 6 años), no sintió nada.
“No la conocí, no tengo recuerdo de ella conmigo, lastimosamente. Era un niño, no lo entendí, no le presté atención. Yo sabía que la señora con la que vivía no era mi mamá pero igual la quería y la quiero aún como tal. La noticia me la dio mi abuela y me contó que mi mamá estaba en el cielo y desde allá siento que me cuida y siempre está protegiéndome, me siento seguro y la siento a mi lado”, dice el joven quien guarda un innegable parecido físico con la más exitosa exponente del vallenato. (Lea aquí: Patricia Teherán: Cartagena aún recuerda a su Diosa del vallenato)

Alex duerme en el cuarto que era de su mamá, una casa de dos pisos en el barrio Nuevo Bosque y allí, todas las noches reza y mira el retrato de su Diosa, que reposa en la pared, para contarle cómo estuvo su día y a la vez, recordarle lo mucho que la extraña.

“Hago todo solo, mi abuelo me sostuvo hasta que terminé el bachillerato y ahora me sostengo solo, soy DJ en la discoteca Taboo Crossover Club, una discoteca de la ciudad”, contó.

Su vida es la música, “Me levanto todos los días con música, además ahora hace parte de mi trabajo, pero nunca he tenido apoyo para meterme de lleno en este campo, no tengo a nadie que me incentive a hacerlo”, afirma Alex, no dejando de lado el comentario de que “seguro si mi mamá viviera mi vida fuese diferente, muy feliz y la acompañaría a todos lados”.

NUNCA RECIBIÓ REGALÍAS

A pesar del éxito de su madre en la música vallenata, la familia de Yuri Alexander, según cuenta, sólo recibió dinero de las regalía tres años hasta que la mamá de Patricia falleció. “Mi abuela los recibió durante tres años hasta que murió, no me ha llegado nada a mi, no he tenido a quien preguntarle o con quien asesorarme porque estoy solo, todo lo que hago lo hago yo y no sé donde dirigirme ni a quien preguntar por eso”, afirmó el joven quien ahora vive con la última compañera sentimental de su abuelo fallecido y tios.


QUIERE CONOCER SU FAMILIA

Alex, quien prefiere obviar su primer nombre hasta saber la historia de porqué su mamá se lo puso, es un chico que inicia su vida de adulto en medio de la realidad de no tener una figura familiar que sea su punto de apoyo, quiere estudiar una carrera universitaria, se inclina por la administración de empresas y a la vez se pregunta por la historia que nadie le ha contado y es la de su padre, también difunto, Rodrigo Castillo.

“Tampoco nunca conocí a mi papá, Rodrigo Castillo, según me contaron a los cinco años mi abuela por parte de papá llegó a donde yo vivía con mi tío, miró cómo estaba yo y se fue, desde ese día no la he vuelto a ver. Si me preguntas que si quisiera conocer su familia diría que si, igual era mi papá y siempre me dijeron que él me quería mucho, que estaba bastante pendiente de mi, creo que él pasaba bastante ocupado, me decían que tenía una finca y no se más nada”, precisó Alex quien se imagina que no lleva el apellido de su padre porque a sus papás no les dio tiempo de registrarlo. “A mi me registró mi abuelo, aparezco como hijo de él, seguro a mi mamá no le dio tiempo de hacerlo”.

TAMPOCO HABLA CON LOS QUE ERAN AMIGOS Y COLEGAS DE SU MAMÁ

Al parecer y por lo que cuenta el único hijo de Patricia Teherán, luego de la muerte de ella nadie se volvió a acordar de él. “Ningún amigo de mi mamá se ha acercado a mi, no tengo idea quien es la gente que ella mencionaba en sus canciones y también me gustaría conocerlos porque ellos deben tener más detalles de mi mamá que quisiera saber. Hay gente que me dice que aún la escuchan, que la aman, que la recuerdan y yo no sé que decirles, no sé mucho de ella, sólo lo básico”, así concluye este joven su primera entrevista para medios escritos, una entrevista llena de ilusión, de muchas preguntas y sobre todo de muchos sueños y dudas por resolver.

Quisiera un abrazo de ella, si los tuviera al frente les diría que los quiero mucho y que me hacen falta, con esta frase Yuris Alexander Teheran Romero describe el profundo sentimiento por sus progenitores, la difunta Diosa del Vallenato Patricia Teherán, y Rodrigo Castillo.

Alex, como se presenta, ya tiene 20 años, tiempo en el que le ha tocado crecer al lado de recuerdos e inquietudes, dudas que algún día sueña con encontrarles respuesta.

A diario rondan en su cabeza, y abundan más en fechas como la de ayer 19 de enero, cuando su madre cumple años de fallecida, cientos de dudas que nunca ha logrado aclarar y que sólo con su madre o padre podría resolver. (Lea aquí: El confidente de Patricia Teherán cuenta los últimos momentos de la artista)

Alex, habló con El Universal.com.co de cómo ha sido su vida desde niño y cómo es ahora cuando ya su adultez empieza a salir a flote.

“Mis primeros años de vida los pasé con un tío, es el hermano de mi mamá quien estuvo viviendo con una muchacha por un tiempo. Ellos me criaron hasta los 5 años, luego ellos se dejaron y yo me quedé con ella hasta los ocho años, de ahí mi abuelo me mandó a buscar y viví con él hasta que falleció el año pasado”, inicia contando Yuri Alexander.

En esa época y rodeado de una figura paterna y materna sus días transcurrían entre la tranquilidad y la inocencia, tanto que cuando le dijeron la historia de su verdadera mamá (a sus 6 años), no sintió nada.
“No la conocí, no tengo recuerdo de ella conmigo, lastimosamente. Era un niño, no lo entendí, no le presté atención. Yo sabía que la señora con la que vivía no era mi mamá pero igual la quería y la quiero aún como tal. La noticia me la dio mi abuela y me contó que mi mamá estaba en el cielo y desde allá siento que me cuida y siempre está protegiéndome, me siento seguro y la siento a mi lado”, dice el joven quien guarda un innegable parecido físico con la más exitosa exponente del vallenato. (Lea aquí: Patricia Teherán: Cartagena aún recuerda a su Diosa del vallenato)

Alex duerme en el cuarto que era de su mamá, una casa de dos pisos en el barrio Nuevo Bosque y allí, todas las noches reza y mira el retrato de su Diosa, que reposa en la pared, para contarle cómo estuvo su día y a la vez, recordarle lo mucho que la extraña.

“Hago todo solo, mi abuelo me sostuvo hasta que terminé el bachillerato y ahora me sostengo solo, soy DJ en la discoteca Taboo Crossover Club, una discoteca de la ciudad”, contó.

Su vida es la música, “Me levanto todos los días con música, además ahora hace parte de mi trabajo, pero nunca he tenido apoyo para meterme de lleno en este campo, no tengo a nadie que me incentive a hacerlo”, afirma Alex, no dejando de lado el comentario de que “seguro si mi mamá viviera mi vida fuese diferente, muy feliz y la acompañaría a todos lados”.

NUNCA RECIBIÓ REGALÍAS

A pesar del éxito de su madre en la música vallenata, la familia de Yuri Alexander, según cuenta, sólo recibió dinero de las regalía tres años hasta que la mamá de Patricia falleció. “Mi abuela los recibió durante tres años hasta que murió, no me ha llegado nada a mi, no he tenido a quien preguntarle o con quien asesorarme porque estoy solo, todo lo que hago lo hago yo y no sé donde dirigirme ni a quien preguntar por eso”, afirmó el joven quien ahora vive con la última compañera sentimental de su abuelo fallecido y tios.


QUIERE CONOCER SU FAMILIA

Alex, quien prefiere obviar su primer nombre hasta saber la historia de porqué su mamá se lo puso, es un chico que inicia su vida de adulto en medio de la realidad de no tener una figura familiar que sea su punto de apoyo, quiere estudiar una carrera universitaria, se inclina por la administración de empresas y a la vez se pregunta por la historia que nadie le ha contado y es la de su padre, también difunto, Rodrigo Castillo.

“Tampoco nunca conocí a mi papá, Rodrigo Castillo, según me contaron a los cinco años mi abuela por parte de papá llegó a donde yo vivía con mi tío, miró cómo estaba yo y se fue, desde ese día no la he vuelto a ver. Si me preguntas que si quisiera conocer su familia diría que si, igual era mi papá y siempre me dijeron que él me quería mucho, que estaba bastante pendiente de mi, creo que él pasaba bastante ocupado, me decían que tenía una finca y no se más nada”, precisó Alex quien se imagina que no lleva el apellido de su padre porque a sus papás no les dio tiempo de registrarlo. “A mi me registró mi abuelo, aparezco como hijo de él, seguro a mi mamá no le dio tiempo de hacerlo”.

TAMPOCO HABLA CON LOS QUE ERAN AMIGOS Y COLEGAS DE SU MAMÁ

Al parecer y por lo que cuenta el único hijo de Patricia Teherán, luego de la muerte de ella nadie se volvió a acordar de él. “Ningún amigo de mi mamá se ha acercado a mi, no tengo idea quien es la gente que ella mencionaba en sus canciones y también me gustaría conocerlos porque ellos deben tener más detalles de mi mamá que quisiera saber. Hay gente que me dice que aún la escuchan, que la aman, que la recuerdan y yo no sé que decirles, no sé mucho de ella, sólo lo básico”, así concluye este joven su primera entrevista para medios escritos, una entrevista llena de ilusión, de muchas preguntas y sobre todo de muchos sueños y dudas por resolver.