El 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

El 8 de marzo de 1990 a la 1:45 de la madrugada, sonaba un acordeón en la plaza central de Villanueva Guajira que auguraba vientos de prosperidad; misma hora y fecha en la que luego de un parto arduo y doloroso en el Cafetal, Adelita, la partera del pueblo, posaba sobre una cuna de acordeones a Samir Vence Romero, el segundo hijo de Lubis María Romero Ospino y Armando Francisco Vence Farfán “El Mono Vence”.


“Quiero morirme como mueren los inviernos
bajo el silencio de una noche veraniega
quiero morirme como se muere mi pueblo
serenamente sin quejarme de esta pena
quiero el sepulcro de una noche sin luceros
luego resucitar para una noche parrandera…”

Oriundo de Villa Nueva Guajira, lleva en su sangre las notas de una región tocada por los aires vallenatos y que ha visto nacer y crecer a los mejores exponentes de este género lleno de poesía y sentimiento. Con el privilegio de haber nacido en una familia 100\% musical donde las tardes y noches en reuniones bajo el calor de una familia numerosa, cálida y amable, se contaban historias y anécdotas del diario vivir acompañadas de las notas de una melancólica, sentimental, alegre o parrandera acordeón.

Entre juegos y acompañado de la inocencia de un niño, Samir se sentaba bajo el palo de mango de la puerta de su casa a percibir pero sin entender, las notas de un acordeón tocada con singular magistralidad, las interpretaciones de su tío Israel Romero Ospino “El Pollo Irra” el mejor acordeonero del mundo, retumbaban por todo Villa Nueva y toda la provincia, acompañando las letras de las canciones más bonitas que en su vida ha de escuchar, una melodía y composiciones llenas de armonía, lírica y poesía que solo un poeta, el poeta de Villa Nueva, su tío Rosendo Romero escribe y compone solo con el sentimiento evocado por un momento brillante de inspiración.
Aquella estirpe de Escolástico Romero, el precursor de la dinastía Romero, comenzaban a nacer dentro del alma de Samir y al ver la inquietud de su hijo y la sonrisa dibujada en su rostro al escuchar las melodías extraordinarias y sobre naturales del acordeón de su tío, su padre “El Mono Vence” con el fuerte deseo, sueño y anhelo de ver en su primer hijo varón, la casta, raza y la continuación de la dinastía y una familia llena de atributos musicales, decide regalarle a la edad de 5 años su primer acordeón, un acordeón de dos hileras, con el firme propósito de involucrar a su hijo en la interpretación de aquel instrumento venido del viejo continente.

Este hecho marca el futuro musical de Samir, quien al recibir su instrumento y hacer sonar el primer pito en toda su vida, fue arroyado por el amor que genera la música vallenata en todos los pobladores de la región, sin embargo, bajo la presión de un padre motivado por su propio sueño, Samir comienza a recibir sus primeras clases con el viejo Victor Quinto sin muchos resultados, hasta que en una “mañanita de invierno” en las fiestas de Santo Thomas bajo la acogida de una parranda vallenta, las notas emanadas de un acordeón Hohner cinco letras interpretada por el acordeonero Marcos Bedoya, despiertan en el muchacho toda aquella pasión que hasta el momento se escondía detrás de una tímida y desinteresada actitud.

Con el correr de los años, Marcos guía la habilidad del futuro acordeonero del Binomio de Oro con sabios y valiosos consejos, hasta que el 10 de Enero de 2001 un trágico accidente que arrebata la vida de su padre, Armando “El Mono Vence”, aleja a Samir del acordeón y de toda intención de continuar con la dinastía.

Luego de cuatro años y tras graduarse en el 2008 como bachiller del Colegio Alfonso López Pumarejo de la ciudad de Valledupar, Samir decide trasladarse a Venezuela, donde su primo Israel David Romero tiene la suficiente energía y un alto carisma junto con la presión de sus familiares, amigos y allegados que reconocían en él una habilidad innata y haciéndole caer en la cuenta del sueño de su padre y que podía sentir su aliento y respiración en cada aire emanado del fuelle del acordeón, Samir se involucra nuevamente en un mundo rodeado de pitos y bajos; es así como crea Laykos, su primera agrupación, rodeado de jóvenes talentos venezolanos con quienes grabó sus dos primeros éxitos vallenatos.

Tras su regreso a Valledupar en 2009 y nuevamente guiado por Marcos, Samir tiene la oportunidad de grabar un doblaje con el reconocido acordeonero y exintegrante del Binomio de Oro, sin embargo, Samir decide tomar un rumbo diferente al de la música y esta vez, se inclina por las Relaciones Internacionales y comienza sus estudios en la Universidad del Norte en Barranquilla.

Al terminar su primer semestre, Samir pasa sus primeras vacaciones en una ciudad adornada con la geometría de la emboscada, Ocaña, la ciudad de los Caro, donde reside su tía Dolbis Romero y es allí, donde conoce al Joven Talento y Cantautor Ocañero Manuel Molina y tras crearse un fuerte vínculo entre ambos, decide abandonar sus estudios para irse a vivir a Bogotá con el propósito de crear su segunda agrupación vallenata con la que grabó dos temas. Tras su llegada a Bogotá, comienza a trabajar como instructor de música en la reconocida academia Francisco el Hombre, hecho que catapulta sus habilidades musicales y a su nueva agrupación teniendo gran éxito en la capital. Seguido a esto y haciendo caso a su corazón e instinto y con el fuerte deseo de ser una personas más espiritual, decide retomar sus estudios, esta vez, en el programa de psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.

Sin mas, tras muchos años de preparación y con el fuerte deseo y anhelo de poder tocar al lado del mejor acordeonero del mundo “Su tío” y continuar con el legado de su familia, su sueño y el de su padre, el 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

Es así como el 20 de Setiembre de 2015 Samir regresa a Villa Nueva, ahora como integrante del Binomio de Oro, donde rodeado de un público exigente y en pleno Festival Vallenato Cuna de Acordeones, Israel Romero hace la presentación oficial del nuevo acordeonero de la agrupación. Bastó solo con hacer sonar por primera vez en la tarima Escolástico Romero su acordeón, para que del cielo cayera un suave rocío que mandaba un poderoso mensaje, Armando “El mono Vence” lloró de emoción y alegría al ver su sueño y el de su hijo hecho realidad.

Carlo F. D’vera P.
23/09/2015

El 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

El 8 de marzo de 1990 a la 1:45 de la madrugada, sonaba un acordeón en la plaza central de Villanueva Guajira que auguraba vientos de prosperidad; misma hora y fecha en la que luego de un parto arduo y doloroso en el Cafetal, Adelita, la partera del pueblo, posaba sobre una cuna de acordeones a Samir Vence Romero, el segundo hijo de Lubis María Romero Ospino y Armando Francisco Vence Farfán “El Mono Vence”.


“Quiero morirme como mueren los inviernos
bajo el silencio de una noche veraniega
quiero morirme como se muere mi pueblo
serenamente sin quejarme de esta pena
quiero el sepulcro de una noche sin luceros
luego resucitar para una noche parrandera…”

Oriundo de Villa Nueva Guajira, lleva en su sangre las notas de una región tocada por los aires vallenatos y que ha visto nacer y crecer a los mejores exponentes de este género lleno de poesía y sentimiento. Con el privilegio de haber nacido en una familia 100\% musical donde las tardes y noches en reuniones bajo el calor de una familia numerosa, cálida y amable, se contaban historias y anécdotas del diario vivir acompañadas de las notas de una melancólica, sentimental, alegre o parrandera acordeón.

Entre juegos y acompañado de la inocencia de un niño, Samir se sentaba bajo el palo de mango de la puerta de su casa a percibir pero sin entender, las notas de un acordeón tocada con singular magistralidad, las interpretaciones de su tío Israel Romero Ospino “El Pollo Irra” el mejor acordeonero del mundo, retumbaban por todo Villa Nueva y toda la provincia, acompañando las letras de las canciones más bonitas que en su vida ha de escuchar, una melodía y composiciones llenas de armonía, lírica y poesía que solo un poeta, el poeta de Villa Nueva, su tío Rosendo Romero escribe y compone solo con el sentimiento evocado por un momento brillante de inspiración.
Aquella estirpe de Escolástico Romero, el precursor de la dinastía Romero, comenzaban a nacer dentro del alma de Samir y al ver la inquietud de su hijo y la sonrisa dibujada en su rostro al escuchar las melodías extraordinarias y sobre naturales del acordeón de su tío, su padre “El Mono Vence” con el fuerte deseo, sueño y anhelo de ver en su primer hijo varón, la casta, raza y la continuación de la dinastía y una familia llena de atributos musicales, decide regalarle a la edad de 5 años su primer acordeón, un acordeón de dos hileras, con el firme propósito de involucrar a su hijo en la interpretación de aquel instrumento venido del viejo continente.

Este hecho marca el futuro musical de Samir, quien al recibir su instrumento y hacer sonar el primer pito en toda su vida, fue arroyado por el amor que genera la música vallenata en todos los pobladores de la región, sin embargo, bajo la presión de un padre motivado por su propio sueño, Samir comienza a recibir sus primeras clases con el viejo Victor Quinto sin muchos resultados, hasta que en una “mañanita de invierno” en las fiestas de Santo Thomas bajo la acogida de una parranda vallenta, las notas emanadas de un acordeón Hohner cinco letras interpretada por el acordeonero Marcos Bedoya, despiertan en el muchacho toda aquella pasión que hasta el momento se escondía detrás de una tímida y desinteresada actitud.

Con el correr de los años, Marcos guía la habilidad del futuro acordeonero del Binomio de Oro con sabios y valiosos consejos, hasta que el 10 de Enero de 2001 un trágico accidente que arrebata la vida de su padre, Armando “El Mono Vence”, aleja a Samir del acordeón y de toda intención de continuar con la dinastía.

Luego de cuatro años y tras graduarse en el 2008 como bachiller del Colegio Alfonso López Pumarejo de la ciudad de Valledupar, Samir decide trasladarse a Venezuela, donde su primo Israel David Romero tiene la suficiente energía y un alto carisma junto con la presión de sus familiares, amigos y allegados que reconocían en él una habilidad innata y haciéndole caer en la cuenta del sueño de su padre y que podía sentir su aliento y respiración en cada aire emanado del fuelle del acordeón, Samir se involucra nuevamente en un mundo rodeado de pitos y bajos; es así como crea Laykos, su primera agrupación, rodeado de jóvenes talentos venezolanos con quienes grabó sus dos primeros éxitos vallenatos.

Tras su regreso a Valledupar en 2009 y nuevamente guiado por Marcos, Samir tiene la oportunidad de grabar un doblaje con el reconocido acordeonero y exintegrante del Binomio de Oro, sin embargo, Samir decide tomar un rumbo diferente al de la música y esta vez, se inclina por las Relaciones Internacionales y comienza sus estudios en la Universidad del Norte en Barranquilla.

Al terminar su primer semestre, Samir pasa sus primeras vacaciones en una ciudad adornada con la geometría de la emboscada, Ocaña, la ciudad de los Caro, donde reside su tía Dolbis Romero y es allí, donde conoce al Joven Talento y Cantautor Ocañero Manuel Molina y tras crearse un fuerte vínculo entre ambos, decide abandonar sus estudios para irse a vivir a Bogotá con el propósito de crear su segunda agrupación vallenata con la que grabó dos temas. Tras su llegada a Bogotá, comienza a trabajar como instructor de música en la reconocida academia Francisco el Hombre, hecho que catapulta sus habilidades musicales y a su nueva agrupación teniendo gran éxito en la capital. Seguido a esto y haciendo caso a su corazón e instinto y con el fuerte deseo de ser una personas más espiritual, decide retomar sus estudios, esta vez, en el programa de psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.

Sin mas, tras muchos años de preparación y con el fuerte deseo y anhelo de poder tocar al lado del mejor acordeonero del mundo “Su tío” y continuar con el legado de su familia, su sueño y el de su padre, el 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

Es así como el 20 de Setiembre de 2015 Samir regresa a Villa Nueva, ahora como integrante del Binomio de Oro, donde rodeado de un público exigente y en pleno Festival Vallenato Cuna de Acordeones, Israel Romero hace la presentación oficial del nuevo acordeonero de la agrupación. Bastó solo con hacer sonar por primera vez en la tarima Escolástico Romero su acordeón, para que del cielo cayera un suave rocío que mandaba un poderoso mensaje, Armando “El mono Vence” lloró de emoción y alegría al ver su sueño y el de su hijo hecho realidad.

Carlo F. D’vera P.
23/09/2015

El 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

El 8 de marzo de 1990 a la 1:45 de la madrugada, sonaba un acordeón en la plaza central de Villanueva Guajira que auguraba vientos de prosperidad; misma hora y fecha en la que luego de un parto arduo y doloroso en el Cafetal, Adelita, la partera del pueblo, posaba sobre una cuna de acordeones a Samir Vence Romero, el segundo hijo de Lubis María Romero Ospino y Armando Francisco Vence Farfán “El Mono Vence”.


“Quiero morirme como mueren los inviernos
bajo el silencio de una noche veraniega
quiero morirme como se muere mi pueblo
serenamente sin quejarme de esta pena
quiero el sepulcro de una noche sin luceros
luego resucitar para una noche parrandera…”

Oriundo de Villa Nueva Guajira, lleva en su sangre las notas de una región tocada por los aires vallenatos y que ha visto nacer y crecer a los mejores exponentes de este género lleno de poesía y sentimiento. Con el privilegio de haber nacido en una familia 100\% musical donde las tardes y noches en reuniones bajo el calor de una familia numerosa, cálida y amable, se contaban historias y anécdotas del diario vivir acompañadas de las notas de una melancólica, sentimental, alegre o parrandera acordeón.

Entre juegos y acompañado de la inocencia de un niño, Samir se sentaba bajo el palo de mango de la puerta de su casa a percibir pero sin entender, las notas de un acordeón tocada con singular magistralidad, las interpretaciones de su tío Israel Romero Ospino “El Pollo Irra” el mejor acordeonero del mundo, retumbaban por todo Villa Nueva y toda la provincia, acompañando las letras de las canciones más bonitas que en su vida ha de escuchar, una melodía y composiciones llenas de armonía, lírica y poesía que solo un poeta, el poeta de Villa Nueva, su tío Rosendo Romero escribe y compone solo con el sentimiento evocado por un momento brillante de inspiración.
Aquella estirpe de Escolástico Romero, el precursor de la dinastía Romero, comenzaban a nacer dentro del alma de Samir y al ver la inquietud de su hijo y la sonrisa dibujada en su rostro al escuchar las melodías extraordinarias y sobre naturales del acordeón de su tío, su padre “El Mono Vence” con el fuerte deseo, sueño y anhelo de ver en su primer hijo varón, la casta, raza y la continuación de la dinastía y una familia llena de atributos musicales, decide regalarle a la edad de 5 años su primer acordeón, un acordeón de dos hileras, con el firme propósito de involucrar a su hijo en la interpretación de aquel instrumento venido del viejo continente.

Este hecho marca el futuro musical de Samir, quien al recibir su instrumento y hacer sonar el primer pito en toda su vida, fue arroyado por el amor que genera la música vallenata en todos los pobladores de la región, sin embargo, bajo la presión de un padre motivado por su propio sueño, Samir comienza a recibir sus primeras clases con el viejo Victor Quinto sin muchos resultados, hasta que en una “mañanita de invierno” en las fiestas de Santo Thomas bajo la acogida de una parranda vallenta, las notas emanadas de un acordeón Hohner cinco letras interpretada por el acordeonero Marcos Bedoya, despiertan en el muchacho toda aquella pasión que hasta el momento se escondía detrás de una tímida y desinteresada actitud.

Con el correr de los años, Marcos guía la habilidad del futuro acordeonero del Binomio de Oro con sabios y valiosos consejos, hasta que el 10 de Enero de 2001 un trágico accidente que arrebata la vida de su padre, Armando “El Mono Vence”, aleja a Samir del acordeón y de toda intención de continuar con la dinastía.

Luego de cuatro años y tras graduarse en el 2008 como bachiller del Colegio Alfonso López Pumarejo de la ciudad de Valledupar, Samir decide trasladarse a Venezuela, donde su primo Israel David Romero tiene la suficiente energía y un alto carisma junto con la presión de sus familiares, amigos y allegados que reconocían en él una habilidad innata y haciéndole caer en la cuenta del sueño de su padre y que podía sentir su aliento y respiración en cada aire emanado del fuelle del acordeón, Samir se involucra nuevamente en un mundo rodeado de pitos y bajos; es así como crea Laykos, su primera agrupación, rodeado de jóvenes talentos venezolanos con quienes grabó sus dos primeros éxitos vallenatos.

Tras su regreso a Valledupar en 2009 y nuevamente guiado por Marcos, Samir tiene la oportunidad de grabar un doblaje con el reconocido acordeonero y exintegrante del Binomio de Oro, sin embargo, Samir decide tomar un rumbo diferente al de la música y esta vez, se inclina por las Relaciones Internacionales y comienza sus estudios en la Universidad del Norte en Barranquilla.

Al terminar su primer semestre, Samir pasa sus primeras vacaciones en una ciudad adornada con la geometría de la emboscada, Ocaña, la ciudad de los Caro, donde reside su tía Dolbis Romero y es allí, donde conoce al Joven Talento y Cantautor Ocañero Manuel Molina y tras crearse un fuerte vínculo entre ambos, decide abandonar sus estudios para irse a vivir a Bogotá con el propósito de crear su segunda agrupación vallenata con la que grabó dos temas. Tras su llegada a Bogotá, comienza a trabajar como instructor de música en la reconocida academia Francisco el Hombre, hecho que catapulta sus habilidades musicales y a su nueva agrupación teniendo gran éxito en la capital. Seguido a esto y haciendo caso a su corazón e instinto y con el fuerte deseo de ser una personas más espiritual, decide retomar sus estudios, esta vez, en el programa de psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.

Sin mas, tras muchos años de preparación y con el fuerte deseo y anhelo de poder tocar al lado del mejor acordeonero del mundo “Su tío” y continuar con el legado de su familia, su sueño y el de su padre, el 14 de Septiembre de 2015, a las 3:45 de la tarde en plena clase de psicología de grupos, Samir recibe una llamada de su primo Israel David. “Primo, manito, ¿estás preparado? Eres el nuevo acordeonero del Binomio de Oro”

Es así como el 20 de Setiembre de 2015 Samir regresa a Villa Nueva, ahora como integrante del Binomio de Oro, donde rodeado de un público exigente y en pleno Festival Vallenato Cuna de Acordeones, Israel Romero hace la presentación oficial del nuevo acordeonero de la agrupación. Bastó solo con hacer sonar por primera vez en la tarima Escolástico Romero su acordeón, para que del cielo cayera un suave rocío que mandaba un poderoso mensaje, Armando “El mono Vence” lloró de emoción y alegría al ver su sueño y el de su hijo hecho realidad.

Carlo F. D’vera P.
23/09/2015