La canción que hizo llorar a Colacho Mendoza
Fuente: Crónica por Por Juan Rincón Vanegas @juanrinconv | Fecha: 2016-09-27 | Visitas: 8498
En medio de las miles de alegrías que vivió en su vida musical Nicolás Elías “Colacho” Mendoza Daza, solamente una lo hizo llorar muchas veces. Ese detalle cantado lo recibió en una memorable parranda por parte de Ivo Luis Díaz Ramos, el hijo de Leandro Díaz, quien hace remembranza de esa historia que vivió al lado del hombre que lo proyectó por el mundo vallenato.
“Yo conocí a “Colacho” Mendoza cuando tenía siete años, por las visitas a nuestra casa en San Diego, debido a que iba al pueblo a visitar a su mamá y a su novia Fanny Zuleta”.
No para de contar y anota: “Cuando tuve al frente a “Colacho” fue algo emocionante porque ya sabía de él a través de mi papá. De aquella vez me quedó la imagen del señor que tenía sombrero elegante y con una nota que cautivaba”.
Recalca sobre la imagen de ese músico que tiempo después se enteró interpretaba las canciones del maestro Rafael Escalona y el acordeonero invitado a las eternas parrandas de la familia Pavajeau y de Hernando Molina Céspedes.
Cuenta que a través de esa sincera amistad con Leandro Díaz, fue el primero en grabarle varias canciones entre ellas “Yo comprendo”, “Morenita” y “La bruja”
La primera grabación
A Ivo, le sirvió sobremanera acompañar a su padre en los largos recorridos por ciudades y pueblos a donde llevaba el mensaje musical y aprovechaba para cantar una que otra canción.
En el año 1989 Ivo, grabó su primer trabajo musical con el Rey Vallenato Rafael Salas, y no dejaba de acompañar a su progenitor hasta que una vez le dieron la oportunidad de cantar cinco canciones con “Colacho”. “Todo eso se lo debo a mi padrino Darío Pavajeau, quien me volvió a invitar a la parranda y canté más de 10 canciones”.
Entonces llegó la mejor oportunidad de su vida que la cuenta de la siguiente manera: “El gran “Colacho” Mendoza le dice a mi papá que dentro de 15 días iba a tocar una fiesta para que me diera permiso y lo acompañara. Mi papá se sintió halagado y fue el comienzo de mi cercana relación con este gran acordeonero que supo valorar mi talento”.
De esa manera llegó la oportunidad de grabar un trabajo musical que llevó el titulo de “Maestría de triunfadores” y fue presentado la noche del jueves 11 de junio de 1992, y minutos después se conoció la noticia de la muerte de Rafael Orozco en Barranquilla.
En total esta pareja musical grabó 10 producciones musicales. “Estuvimos 14 años unidos y solamente nos separó la muerte”.
En ese instante Ivo bajó su cabeza, se hizo una pausa en la entrevista porque la nostalgia lo atrapó al pensar en aquel hombre guajiro, Rey Vallenato en 1969, Rey de Reyes en 1987 del Festival de la Leyenda Vallenata y que además de él grabó con Diomedes Díaz, Poncho Zuleta, Jorge Oñate, Silvio Brito, Pedro García, Carlos Lleras Araújo, Isaac Carrillo, Julio Bovea Fandiño e incluso con la orquesta Guayacán.
Señor “Colacho”
Al acumular todas esas vivencias el cantautor Ivo Díaz, había venido pensando en hacerle una canción a su compañero “Colacho” Mendoza y la oportunidad le llegó en el año 1994. Fue en una parranda donde le rindió el mejor homenaje en vida y ante pocas personas.
“No sabía como presentar la canción porque el acordeonero era “Colacho”. Le dije al dueño de la parranda que tenía una nueva canción y me dijo que la cantara. No había otra opción. Solamente a “Colacho” le chiflé la melodía”. Entonces “Colacho” Mendoza comenzó a tocar su acordeón y de repente se sorprendió con el mensaje.
Señor “Colacho” Mendoza
el acordeonero más noble del Valle
hoy quisiera dedicarle
los versos sentidos de esta inspiración.
Y seguidamente en medio del canto hace varias preguntas que el mismo sin dudarlo responde:
¿Como se llama el que toca?
“Colacho”
¿Ese quiere la gente?
“Colacho”
El de la bonita nota
“Colacho”
Ese amigo inteligente
“Colacho”
El cantor de vallenato auténtico cuenta entre lágrimas, 22 años después, la reacción de “Colacho” por ese homenaje.
“Por primera vez lo cuento. Fue una expresión de asombro. Fijó su mirada en mí. Estaba llorando al escuchar la manera como lo estaba describiendo. Cuando terminó la canción se puso de pie y me regaló un abrazo de agradecimiento. Seguidamente se sentó y me pidió que la volviera a cantar. En la parranda la canción se repitió más de diez veces y siempre estuvo emocionado”.
Desde ese momento la canción se convirtió en el himno de “Colacho” Mendoza, de sus amigos y seguidores. Cuando el trabajo musical se grabó no había otro titulo “Señor Colacho” porque como el mismo acordeonero la describió. “Es una estaca de canción”.
Ivo regresa para recordar.”En todas las presentaciones se cantaba, y se convirtió en el más sentido homenaje al amigo, al acordeonero, ese del que aprendí la disciplina, la formalidad y la puntualidad. El mismo al que dibujo fielmente en la canción. El hombre de la magia, el maestro que dejó su propia escuela, encabezada por su hijo Wilber, también Rey Vallenato”.
El hijo de Leandro Díaz buscó la mejor manera de exaltar a ese hijo de Sabanas de Manuela, San Juan del Cesar, La Guajira, quien nació el miércoles 15 de abril de 1936 y murió en Valledupar el sábado 27 de septiembre de 2003, dejando un sello imborrable en la auténtica música vallenata.
Ese que es un buen amigo
ya él era famoso, yo estaba muchacho
ese de sombrero fino, de acordeón al pecho
se llama “Colacho”.
Por Juan Rincón Vanegas
@juanrinconv